Zaguán sin recibo
Joaquín Ortega
I
En el fuego profundo un
cono verde
Pasa de mano el tono
Incluso un levante rebote
de mentiras
Se abre al campo
Eslabón desmontado a la
mitad
II
Adentro de la copa de
oporto
Sueña el sueño
Ramalazos a lo lejos
Incendios prematuros
Fijezas apostadas
Esperando por el choque
Los salteadores caseros
de sonrisa conocida
Que con la mano
principiaban la ausencia
Al salir de la curva
Chocan el recuerdo de
los maltratos
Infantería de infantes
como siempre han sido
Salivados hasta la
caída en avances de puntura
Desde antaño todo mal merienda
músculos de agua
III
Ya nadie lo merece
Todos lo esperan
Y el anochecer no
oscurece
Un ensortijo atado por
el pasillo anclado
La foto vieja del atajo
ahora corregido
Encaballa la sonrisa de
témpanos
Gira con la boca
golpeada
El que ignora la nueva
casa del perdón
Saca brillo a los codos
novicios
Hace espacio para dos
Vasos apilados en
sinfines inferiores
IV
Arda
Ya
Es hora
Que prenda
Contentas al borde en cepas
voladoras
Ampolla de un patán
sobre el grano
Se borra sí retrocedes
Al acertar picachos
Las llaves de copas de
azófar
Que se vuelven broma
cada tralla
Cada nueva niñez
Tanto que ha costado
llegar allí
Un árbol de peces
Uniendo meses
Así el engrudo de dientes
y libros frescos
Así el alumno con el
disco en mano
Con la marca definitiva
Del feroz volcamiento