Estupidez irrenunciable
Mi última mascota fue un rosario
Sólo el sabe prevenirme
Sin esperarme frente al bosque
de todos los muertos
Poco come
poco escribe
Por su voz sé que es la primera base de
Un no juego
Conocí a la secreta dueña que lo cargaba
fue un lunes de aire terminal
Cuando compró la bala para sus sueños
Todavía respiro enojo
Por la menos cansada
De las vocaciones